El melasma no siempre empieza como una gran mancha. A veces aparece de forma sutil, como una sombra en la zona del bigote o una leve pigmentación en las mejillas. Muchas veces ni siquiera nos damos cuenta de que se trata de melasma hasta que empieza a oscurecerse o a extenderse. Y aquí está la clave: cuanto antes actúes, más fácil será mantenerlo bajo control.
Pensar que el acné es exclusivo de la adolescencia es un error común. Cada día en consulta recibo mujeres de 25, 30, 35 años e incluso más, que se preguntan frustradas: “¿por qué me sale acné cuando ya pasé la adolescencia?”.
Lo cierto es que no estás sola: estudios epidemiológicos muestran que entre el 20 % y el 55 % de las mujeres jóvenes y de mediana edad aún presentan brotes de acné después de los 25 años, y un 15 % continúa teniendo acné después de los 40 años.
En los últimos meses, seguro que has oído hablar de los exosomas y los polinucleótidos como si fueran los nuevos milagros de la dermatología estética. Y no me extraña: están en boca de todos, desde influencers hasta profesionales médicos, y se presentan como los avances más prometedores para rejuvenecer la piel.
Pero cuando mis pacientes llegan a consulta emocionadas por probarlos, hay algo que siempre les digo: funcionan, sí… pero no como tú te imaginas.
Si te preocupa el envejecimiento facial y llevas tiempo buscando la mejor opción para tu piel, seguro que has oído hablar del láser CO2 antiaging. No es casualidad: tras más de 20 años viendo pieles en consulta, puedo decirte que es el tratamiento estrella. Funciona donde otros solo prometen, suavizando arrugas, mejorando textura, minimizando poros, borrando cicatrices y devolviendo la luminosidad al rostro. Y lo mejor: la inversión se nota en tu piel.
“Estaba fenomenal… y de repente, ¡zas!, me he dado un bajón brutal en la piel”. Esta frase, palabra por palabra, la escucho constantemente en consulta. Y cada vez que la oigo, pienso lo mismo: el bajón no es de repente. Solo que muchas veces no lo hemos visto venir.
Si estás en ese momento de tu vida en el que te empiezas a notar distinta en el espejo, y te planteas por dónde empezar sin hacer una inversión desmesurada, este post es para ti.
Vamos a hablar de 3 tratamientos estéticos asequibles que dan resultados reales, visibles y duraderos.
Hay una frase que escucho casi a diario en consulta: “Tengo la piel seca y ninguna crema me funciona”.
Lo curioso es que, en la mayoría de los casos, esa sensación de sequedad no tiene nada que ver con una piel seca verdadera. Y cuando tratamos mal nuestra piel desde el inicio, lo más probable es que empeore.
Por eso, antes de lanzarte a comprar una crema nutritiva o buscar productos para hidratar, lo más importante es esto: entender qué le pasa realmente a tu piel.
Hoy os voy a contar un poquito de mi historia… Hace unos años, quería mantener mi peso y mi talla de antes de tener a mis 3 hijos, como si el reloj biológico no hubiera avanzado ni un minuto. Me convertí en una esclava de la báscula: todo lo pesaba, todo lo medía, no podía comer nunca dulces… Y cuando no conseguía estar en el peso ni en la talla que yo quería, me frustraba y me hacía estar con malestar psicológico y emocional.
Así que un día me dije.. SE ACABÓ!
¿Por qué el envejecimiento nos deja con menos pestañas? Con los años, nuestro cuerpo reduce la producción de estrógenos y testosterona, hormonas clave para mantener el folículo piloso activo. Al mismo tiempo, la microcirculación en la zona periocular se vuelve más lenta, la piel pierde colágeno y el ciclo de crecimiento del pelo se acorta.…
Hace un par de semanas te contaba cómo sacar el máximo provecho al retinol potente antes de que lo regulen o retiren del mercado, porque sí, puede que algunos productos de alta concentración desaparezcan de nuestras rutinas. Si no leíste ese post, te recomiendo que lo veas antes de seguir leyendo, porque ahí te explico cómo aprovechar esta etapa al máximo.
Ahora bien, mucha gente se pregunta si ese tipo de productos tan potentes pueden aplicarse también en zonas sensibles como el cuello, el escote o incluso los párpados.