Aplicación de la Toxina botulínica en el Tercio medio e inferior de la cara
El pasado jueves, 11 de Mayo, estuve en el Congreso de Dermatología de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) donde, además de escuchar las charlas tan interesantes de mis compañeros, también impartí la mía sobre “El Botox en el tercio medio inferior”.
La verdad que estaba muy nerviosa como os comenté en las redes sociales, pero todo fue de maravilla. Os voy a contar un poco mi presentación:
¿Sabías que... ?
De acuerdo a la legislación actual en España, la aplicación de la toxina botulínica en áreas fuera del complejo glabelar se consideran off label, es decir, amparadas por el propio criterio profesional y el rigor científico del médico que las realiza. Por ello, en este caso, corresponde al médico explicar al paciente la relación beneficio-riesgo del uso de la toxina botulínica en esta región, y también que su empleo no se contempla en las indicaciones que las autoridades sanitarias han previsto para este medicamento.
Esto es un extensivo para cualquiera de las 3 toxinas que están actualmente disponibles en nuestro país: Vistabel®, Azzalure® y Bocouture®.
¿Qué tipo de botox utilizamos en Dermaforyou?
En la actualidad estoy utilizando vistabel de 50 unidades, diluído con 1.25 ml de suero fisiológico.
Durante años estuve utilizando azalure y lo diluía exactamente igual que vistabel. Bocoure lo utilicé muy poco tiempo .
Debemos prestar especial cuidado para no inyectar el botox en exceso en el tercio medio e inferior de la cara, pues las posibilidades de difusión de la misma a otros músculos vecinos es muy elevada, con los consiguientes efectos adversos que pueden ser dramáticos en cuanto a dificultades para hablar, en la mímica facial o problemas para deglutir líquidos.
Aplicación de la toxina botulínica para…
Arrugas de conejo
Las arrugas de conejo son las debidas a la contracción del músculo nasal.
Es una zona de tratamiento habitual cuando tratamos tercio superior puesto que, al eliminar las arrugas de patas de gallo, se suelen intensificar.
Se marcan arrugando la nariz y se colocan 2u por punto en ambos laterales de la nariz.
Si aplicamos demasiado lejos, puede llevar a parálisis del elevador del labio superior y del ala de la nariz que conllevaría un descenso del labio.
Elevación de la punta nasal
Tratamos el depresor de la punta nasal. Las inyecciones se realizan en un solo punto medio en el ángulo que forma el Philtrum y la columela.
La aguja de 30 G larga se dirige hacia la espina del maxilar y la inyección se hace en una sola infiltración, salvo que el descenso de la punta de la nariz sea muy acusada en cuyo caso los buenos resultados se obtienen con un solo punto de entrada, pero desviada con un leve ángulo hacia un lado entre 2 a 3 mm, sin extraer la aguja del todo y dirigirla luego hacia el lado opuesto entre 2 a 3 mm. Se depositan unas 2 unidades.
Arrugas peribucales o código de barras
Se trata el orbicular de los labios.
Eficaz en arrugas leves, en pacientes jóvenes o de mediana edad y en aquellos con buena tensión cutánea.
La inyección de Toxina Botulínica ayuda a aumentar la percepción de volumen del bermellón porque produce una sutil eversión del labio.
Se recomienda usar pocas unidades por punto de inyección.
En el labio superior la inyección se realiza por fuera de los pilares del filtrum, ya que si se hace cerca de los mismos, el labio puede aplanarse y en 1 o 2 puntos por hemilabio, equidistantes de la comisura labial.
El labio inferior suele requerir 2 o 3 puntos de inyección equidistantes entre la línea media y la comisura.
La aguja debe introducirse muy superficialmente y cerca del bermellón a unos 5 mm de éste, en caso de que queramos mejorar las arrugas peribucales, o justo en el borde del berbellon, si lo que queremos es aumentar el volumen.
Los resultados en esta zona suelen durar menos que en otras debido a que las unidades de botox por punto son mínimas, pero debe realizarse siguiendo esta pauta y dosificación por el riesgo potencial de que el paciente, como efecto indeseado de la acción de la toxina, no pueda silbar, besar o sorber con propiedad los líquidos.
Sonrisa Gingival
Un músculo elevador del labio superior y del ala nasal demasiado activo provoca una sonrisa que enseña demasiado la encía y también suele asociarse a un pliegue nasolabial superior acentuado o prominente.
El tratamiento con toxina es una opción muy válida que debe tenerse en cuenta antes de intervenciones quirúrgicas más cruentas.
La inyección de Toxina botulínica en el fascículo del elevador del labio superior y del ala nasal se realiza con aguja 30 G larga, en el inicio del surco nasogeniano sobre la fosita piriforme (debe ser profunda, por encima de periostio). La dosis habitual 2 unidades en cada punto.
Puede emplearse para suavizar los surcos leves o moderados en pacientes jóvenes o de mediana edad, que tienen pieles cuidadas y elásticas.
Arrugas Labiomentonianas
También conocidas como líneas de marioneta o pliegues de amargura.
El músculo implicado en la formación de estas arrugas es el depresor del ángulo de la boca (depressor anguli oris).
La inyección debe practicarse poco profunda en el punto de cruce de una línea que desciende desde la comisura bucal con una línea horizontal que sigue el mentón.
La aguja debe dirigirse hacia fuera a fin de evitar la inyección en el depresor del labio inferior.
Algunos autores preconizan inyecciones más profundas, en el cruce de la prolongación del surco nasogeniano con la línea mandibular.
No importa si al inyectar resultan afectadas las fibras del platisma , porque también ejerce función de depresión de las esquinas de la boca.
Tratamiento de la barbilla
El tratamiento con botox del músculo mentoniano (mentalis) está indicado en las barbillas que presentan múltiples hoyuelos, semejando un hueso de melocotón.
En los pacientes jóvenes esta imperfección se pone de manifiesto al hablar, pero en aquellas personas de más edad, puede ser notorio también en reposo.
La inyección se realiza en un solo punto en la punta del mentón o en dos puntos laterales a 0.5 cm de la línea media, para que la toxina no difunda al músculo orbicular de los labios y debemos emplear cantidades un tanto variables, como mínimo 2.
Al aplicar producto lateralmente demasiado lejos, conlleva riesgo de parálisis del musculo depresor del labio inferior y puede causar problemas del habla.
Hipertrofia de los músculos maseteros
Para suavizar los rasgos producidos por la hipertrofia de los músculos maseteros, la Toxina botulínica puede inyectarse en 1, 2 o 3 puntos equidistantes, situados 1 cm por encima de la línea mandibular y comenzando en el ángulo de la mandíbula.
Las dosis de toxina a inyectar son variables, y siempre en función de la hipertrofia que el masetero presente. En nuestro caso preferimos las inyecciones en 2 ó 3 puntos, según el ancho del músculo, que resulta fácil de valorar dado lo accesible del mismo a la palpación. La inyección se realiza a profundidad media.
Una técnica práctica, que asegura el correcto posicionamiento de la aguja, es su introducción profunda, llegando hasta el periostio para retirar suave y escalonadamente la aguja.
El resultado que debe esperarse es la remodelación de la cara, que en su porción inferior adopta unos rasgos más suaves.
Tratamiento del cuello
Se trata el musculo platisma. El paciente ideal es el que presenta bandas verticales prominentes en reposo.
Se recomienda un tratamiento conservador con dosis bajas en cada punto e inyecciones superficiales para evitar la complicación de la disfagia que es rara, lo más cómodo es pellizcar la banda y ayuda a una inyección superficial más exacta.
Estiramiento de Nefertiti
Además, la aplicación de toxina a lo largo del margen inferior de la mandíbula y en el lado superior de la banda del platisma posterior puede redefinir el borde mandibular. A éste tipo de procedimiento se le ha denominado “Estiramiento de Neferititi”.
Se aplica 2 unidades por punto de inyección usando 5 puntos a lo largo del margen de la mandíbula, y dos en el lado superior de la banda del platisma posterior.
Escote
Hay diferentes maneras para inyectar el botox en el escote. La clave es tartar toda el área con la toxina botulínica. Una técnica es inyectar en forma de “V” utilizando 2 unidades por punto.