El Botox y sus leyendas negras
En el post de esta semana me gustaría hablaros de algo muy importante y un poquito polémica.
La mayor parte de los pacientes que se acercan a mi consulta siguen teniendo miedo al botox. Cada vez menos, pero todavía sigue siendo sinónimo de tóxico, de algo malo para la piel… Y lo que siempre les digo, y os lo voy a explicar en este post, es que el tratamiento más seguro para el tercio superior de la cara es el Botox.
Cada vez que aconsejo algún tratamiento de botox, me vienen mis pacientes diciéndome: “No, no, yo prefiero ácido hialurónico…”.
El ácido hialurónico es un tratamiento (muy buen tratamiento, por cierto) que nos permite recuperar lo que hemos perdido en la piel, pero el ácido hialurónico es un producto que debemos tener cuidado con él. Sobre todo al aplicarlo en zonas concretas que son zonas de riesgo.
Por ejemplo, el ácido hialurónico en el tercio superior es una zona de algo de riesgo.
Diferencias entre botox y ácido hialurónico
Os lo voy a explicar más detalladamente. El tercio superior de la cara es una zona donde se aplica botox. En el video que os dejo al final del post, vais a ver una imagen con puntitos rojos, esos puntitos son de color rojo porque son zonas de riesgo, son zonas vasculares.
¿Cuál es su riesgo?
El riesgo se encuentra en que si el ácido hialurónico se introduce en alguno de esos pequeños vasitos, sobre todo en la zona del entrecejo que es una zona muy peligrosa, puede producir alteraciones muy importantes. Esas alteraciones importantes incluye ceguera.
¿Por qué es importante que lo sepáis?
Este es un tema muy importante del que no se habla mucho, pero me parece primordial que todos mis pacientes lo sepan.
Como bien he dicho al principio de esta publicación, siempre que venís a mi consulta y os pauto un tratamiento con botox, automáticamente negáis en rotundo y preferís siempre tratamientos con ácido hialurónico.
Os cuento todo esto porque ya hay casos descritos de ceguera producida por tratamientos con ácido hialurónico en estas zonas, ¿Cuántos? Muy pocos, poquísimos, es un efecto secundario rarísimo, la probabilidad de que ocurra es muy muy baja, pero es una probabilidad que existe y el paciente que quiere ponerse ácido hialurónico en esa zona debe saberlo y debe saber que hay zonas de más riesgo.
¿En qué zonas trato yo con ácido hialurónico?
Yo trato muy rara vez con ácido hialurónico en la zona grabelar, muy poquita dosis y muy superficial.
En la Clínica Dermaforyou realizo tratamientos de rinomodelación con ácido hialurónico tratando la raíz nasal, sabiendo que es una zona de riesgo y con las máximas medidas de seguridad para poder evitar esa oclusión vascular o esa embolización.
Con todo esto, no quiero decir que el ácido hialurónico sea ni mejor ni peor que el botox, ni al contrario. Lo único que me gustaría dejar claro es que cada uno tiene sus riesgos y mejores zonas donde se pueden aplicar.