Antes de profundizar en las épocas del año en las que se cae más, es importante entender su ciclo natural. Cada cabello pasa por tres fases:

• Fase anágena (crecimiento): En esta etapa, el cabello crece activamente y puede durar de 2 a 7 años.
• Fase catágena (transición): Durante unas pocas semanas, deja de crecer y se prepara para ser reemplazado.
• Fase telógena (caída): El cabello viejo se desprende y se cae, lo que permite que un nuevo folículo comience a crecer.

Este ciclo es constante, pero ciertos factores estacionales y cambios internos pueden influir en el ritmo al que el cabello se renueva.

Durante los meses de verano, aunque el sol puede tener algunos beneficios para nuestro cabello (como estimular la producción de vitamina D), la exposición prolongada a la radiación UV y los daños del calor pueden debilitar los folículos pilosos. Esto se traduce en una mayor caída en el final de esta estación, como ya explicamos en nuestro artículo ¿Por qué se nos cae tanto el pelo al final del verano?.

El otoño es la estación en la que muchas personas notan un incremento considerable en la caída del cabello. Esto puede estar relacionado con un proceso natural llamado efluvio telógeno estacional. El pelo que fue dañado por el sol en verano entra en la fase telógena y se cae. Además, los cambios de temperatura y la vuelta a las rutinas estresantes pueden influir en esta caída, como detallamos en el post ¿Por qué se me cae tanto el cabello en otoño?.

Aunque menos conocida, la primavera también puede ser una época de caída para algunas personas. Este fenómeno puede ser una respuesta del cuerpo a los cambios hormonales que suceden en los meses anteriores. La renovación celular, incluyendo la del cabello, es más activa en primavera, lo que puede llevar a una caída mayor.

Si bien es normal perder entre 50 y 100 cabellos al día, si notas que la caída persiste o es mayor de lo habitual, es recomendable acudir a un dermatólogo especializado en tricología. Estos profesionales pueden realizar análisis capilares y evaluar tu salud general para descartar problemas como la alopecia, deficiencias nutricionales o desequilibrios hormonales

El cuero cabelludo es la base sobre la que crece el cabello, por lo que es esencial mantenerlo saludable. Aquí algunos consejos clave:

• Limpieza adecuada: Es fundamental lavarlo con frecuencia utilizando un champú adecuado que no irrite el cuero cabelludo. Un buen producto que puedes probar es el Champú Anticaída de Dermaforyou y el acondicionador, formulado con ingredientes naturales que promueven la salud capilar, siempre lo recomiendo a mis pacientes utilizarlos durante, al menos, 3 meses.
• Masajes: Al masajear el cuero cabelludo estimulas la circulación sanguínea, lo que puede favorecer el crecimiento de un cabello más fuerte.

El calor excesivo, ya sea por el sol o por el uso de herramientas de peinado, puede debilitar el cabello y provocar su caída. Usa siempre protectores térmicos antes de aplicar calor y trata de secarlo al aire siempre que sea posible.

La caída del cabello es un proceso natural que varía a lo largo del año. Entender las causas detrás de este fenómeno y adoptar una rutina de cuidado adecuada, usando productos específicos y acudiendo a un especialista cuando sea necesario, te ayudará a mantener tu cuero cabelludo fuerte y saludable.

Una dieta rica en nutrientes es clave para que crezca saludable. Asegúrate de consumir alimentos que contengan vitaminas B, zinc, hierro y biotina. Si consideras que tu dieta puede estar fallando en este aspecto, puedes consultar con un especialista para ver si necesitas suplementos específicos.