6 Mitos Muy Comunes en Dermatología
La dermatología estética y cosmética ha ganado popularidad en los últimos años, pero a su paso han surgido muchos mitos. Estos mitos, aunque interesantes, a menudo desinforman a las personas y las alejan de tomar decisiones acertadas para el cuidado de su piel.
En este post, te voy a contar los mitos más comunes en dermatología que me han llegado a la consulta y vamos a desmentirlos para ayudarte a cuidar tu piel de forma informada y efectiva.
Mito 1: ``Cuanto más producto uses, mejores resultados obtendrás``
Aunque os parezca mentira, pero esto lo he escuchado muchas veces en mi consulta: “A ver, yo me aplico bastante crema porque así siento que hace más efecto, ¿no? Con más cantidad, la piel la va a absorber mejor y los resultados se ven más rápido, ¿verdad?”.
En realidad, si alguna vez me habéis visto aplicarme productos en los videos que he subido a mi canal de youtube, usar mucho producto no te va a dar mejores resultados. Al contrario, puede sobrecargar la piel y causar irritaciones o brotes. La mayoría de los productos están formulados para aplicarse en cantidades pequeñas, porque así es como actúan mejor. Por ejemplo, un sérum o crema hidratante necesita solo unas gotas para ser efectivo. Así que lo mejor es aplicar una pequeña cantidad y ser constante. ¡Menos es más!
Mito 2: ``El tratamiento de neuromodulación es solo para personas mayores``
Esta creencia es algo muy típico, comenzar a tratar el envejecimiento cuando ya lo estás notando en lugar de hacer algo con anterioridad para prevenirlo: “Yo pensaba que el tratamiento de neuromodulación era para personas mayores, para ya cuando tienes arrugas marcadas. ¿A qué edad debería empezar a pensar en él?”.
El tratamiento de neuromodulación no es solo para personas mayores. Cada vez más personas jóvenes lo utilizan de manera preventiva, porque ayuda a que las arrugas de expresión no se vuelvan permanentes. Actúa relajando los músculos faciales, lo cual evita que ciertas arrugas se hagan más profundas. Esto no significa que deba usarse a cualquier edad ni de forma excesiva, pero, aplicado por un profesional y de manera moderada, es una herramienta para mantener una piel más lisa a lo largo del tiempo.
Mito 3: ``Los productos naturales son siempre mejores``
A veces, cuando hablo en mis redes sociales sobre algún producto de dermatología cosmética, me han llegado a escribir: “Yo prefiero productos naturales porque son más suaves para la piel y no tienen tantos químicos, que me dan miedo. ¿Los productos naturales no son más seguros?”.
Que un producto sea natural no garantiza que sea mejor o más seguro para todos. Algunos ingredientes naturales, como aceites esenciales o frutas cítricas, pueden ser agresivos o causar alergias en pieles sensibles. Además, los productos naturales no siempre están probados clínicamente para garantizar que realmente funcionen, y no necesariamente están libres de efectos secundarios. Lo importante es elegir productos de calidad, aprobados dermatológicamente, que se adapten a las necesidades específicas de tu piel.
Mito 4: ``Si tienes piel grasa, no necesitas hidratante``
Una vez, preguntando a una paciente la cosmética que solía utilizar, me dijo: “Yo tengo piel grasa y nunca uso hidratante porque siento que me pondrá la piel más grasosa. ¿No es mejor dejarla sin hidratante para no empeorar la grasa?”.
La piel grasa también necesita hidratación. Cuando no se hidrata adecuadamente, puede llegar a producir más grasa para compensar, lo cual puede empeorar el problema. La clave está en encontrar una hidratante adecuada para piel grasa, como un gel o una fórmula a base de agua, que no añada más aceite. Además, busca productos no comedogénicos, es decir, que no obstruyan los poros. Una hidratante ligera mantendrá tu piel equilibrada sin hacerla más grasa.
Mito 5: ``Solo las personas mayores deben preocuparse por el envejecimiento de la piel``
¡La prevención es clave! El envejecimiento de la piel no empieza de un día para otro. Desde los 20 años, la producción de colágeno en la piel comienza a disminuir, y factores como la exposición al sol, la contaminación y el estrés pueden acelerar el envejecimiento. Empezar a cuidar la piel desde joven ayuda a mantenerla en mejor estado a lo largo de los años. Incorporar productos adecuados y el uso diario de protector solar son esenciales para mantener una apariencia juvenil por más tiempo.
Por increíble que parezca, esto es algo que también he escuchado: “Yo todavía estoy joven, ya cuando sea mayor me preocuparé por el envejecimiento y todo eso.”
Mito 6: ``Solo necesitas usar protector solar en verano``
Esta es la que más me gusta de todas… “En invierno casi no hace sol, ¿de verdad necesito ponerme protector solar todos los días?”.
Para aquellos que me seguís, esta frase me habéis escuchado muchas veces que hay que ponerse crema solar durante TODO el año. Los rayos UV están presentes todo el año, incluso en días nublados o de invierno. Los rayos ultravioleta atraviesan las nubes y las ventanas, así que afectan tu piel incluso en interiores. Por eso, la recomendación es usar protector solar cada día, sin importar la estación o el clima. Reaplica cada dos horas si estás al aire libre para mantener la protección. La exposición constante a los rayos UV sin protección puede provocar envejecimiento prematuro y aumentar el riesgo de cáncer de piel.
La dermatología estética y cosmética está rodeada de mitos que, si bien pueden parecer inofensivos, en realidad influyen en cómo cuidamos nuestra piel. Confiar en fuentes confiables y consultar a dermatólogos certificados es esencial para tomar decisiones informadas. Recuerda que cada piel es única, y lo que funciona para una persona puede no ser ideal para otra. Desmitificar estas creencias es el primer paso hacia una piel sana y radiante.