¿Por qué elegí Talavera de la Reina para vivir y montar mi clínica?
Ya os anuncié hace unas semanas en redes sociales que, aprovechando esta cuarentena, me gustaría que me conocierais un poquito más. Por eso, la semana pasada inauguré una sección más personal donde os hablaré sobre mi vida personal, mi vida como dermatóloga, como madre, mis experiencias, etc.
La semana pasada inauguramos la sección hablando sobre por qué me hice Dermatóloga y hoy quiero hablaros de por qué escogí Talavera de la Reina como ciudad para vivir y establecer mi Clínica de dermatología.
Para los que me conocéis, sabéis que me considero Talaverana aunque mi infancia transcurrió entre Madrid y un pueblo muy pequeñito de 100 habitantes.
Pasé mi adolescencia en Talavera y, aunque me fui para estudiar la carrera y ya no volví a hasta pasados 15 años, ahora llevo aquí asentada 12 años.
Elegí Talavera de la Reina para vivir no sólo porque la mayoría de mi familia y amigos están en Talavera, sino porque es una ciudad ideal.
Es una ciudad muy cómoda, tardo 5 minutos en llegar al trabajo y 15 minutos si voy andando. Me permito el lujo de comer en casa todos los días y ya sabéis que mi nutrición esta ideada para cuidar la salud de mi cuerpo y de mi piel, es un lujo comer comida de casa.
Vivir en Talavera es tener calidad de vida
Al principio me costó adaptarme, estaba acostumbrada al ritmo frenético de la gran ciudad y me daba la sensación de que aquí la gente perdía mucho el tiempo.
Recuerdo mis primeros años en Talavera, fueron un poco locos. Fátima vino enseguida a nuestras vidas y 3 niños tan pequeños que estaban siempre malos… estábamos reventados porque no dormíamos nada. Con los años me he dado cuenta que saber descansar y llevar un ritmo más pausado no es perder tiempo sino ganar vida.
Ahora todo es más fácil. En Talavera tienes de todo… Tienes tiendas típicas: Mango, Zara, H&M, Cortefiel… Y puedes comprar tranquila, sin aglomeraciones. Tenemos un buen cine y buenos restaurantes como Raíces y Sushido.También tenemos Madrid muy cerca a hora y media, cuando tenemos mono de ciudad grande.
Nuestra casa está a las afueras, a un paseo de 5 minutos estamos viendo preciosa naturaleza alrededor del Río Tajo.
Y, además, tengo que dar las gracias a todos los talaveranos porque en ningún momento he sentido así como eso que se dice: “Nadie es profeta en su tierra“. Al contrario, la acogida de mi trabajo siempre ha sido buenísima y me ha permitido seguir creciendo para ofrecer lo mejor para mis paisanos.
Por otra parte, cada vez me doy más cuenta de que Talavera de la Reina es preciosa. Antes no me daba cuenta porque siempre me comparaba con Toledo, pero ahora sé que nunca debemos compararnos con nada ni con nadie, me doy cuenta de que estoy en la mejor ciudad que podría estar.